Palabras en juego
El rugido de la «mareona»
Ayer empezó la segunda vuelta del campeonato de Liga de fútbol con el Sporting y el Oviedo en posiciones, que de continuar así, parecen optimistas para un final con multitudinarias celebraciones en autobuses descubiertos.
Los alegres rugidos de la afición azul y de la «mareona» darán trabajo al jefe de prensa, ese ser pegado a un móvil y un ordenador portátil que establece estrategias, crea imagen, aplica nuevas tecnologías para relacionarse con el entorno… y sugiere técnicas a dirigentes y deportistas para hablar en público salvando preguntas que encierran respuestas, tópicos o muletillas.
En el fútbol asturiano surgió esta figura en 1997 con la llegada de José Luis Rubiera al Sporting. La labor de comunicación empresarial en esta entidad, entre 1997 y 2005, ha sido estudiada por Estefanía Suárez-Otero Redondo en la tesis de grado «The press office of the Real Sporting of Gijón. Communication in football clubs», un trabajo dirigido por Dennis Foy y Sarah Williams, que se presentó en 2006 en la Universidad de Wolverhampton (Reino Unido).
Presenta una introducción teórica y una parte de análisis de la comunicación interna (periódico de distribución gratuita, revista, mensajería electrónica, boletines informativos, radio…), las firmas con los logotipos y la marca, la comunicación externa para crear proximidad (campañas publicitarias, mercadotecnia, patrocinio y mecenazgo de actividades, negocios y comercios, relación con los medios…) y el uso de las nuevas tecnologías para crear un espacio de comunicación entre profesionales, periodistas y aficionados.
Y se completa con un apartado de conclusiones, referencias, bibliografía y cibergrafía consultadas y un apéndice de entrevistas con el jefe de prensa del Sporting, el presidente de su fundación y el presidente de la Asociación de la Prensa Deportiva del Principado de Asturias, José Ramón Rodríguez.
Para las palabras en juego es interesante este trabajo pionero porque refleja el paso de clubes a sociedades anónimas deportivas, la especialización de su comunicación, las estrategias para llegar a la sociedad en el siglo XXI y cómo en ese proceso el lenguaje cambia hacia un estilo claro, preciso y de ideas concretas que evita la antigua retórica que no aporta información.
Publicado en La Nueva España, Oviedo, 28 de enero de 2008.