Cabecera de Idioma y Deporte
1 de octubre de 2007

Palabras en juego

Por Jesús Castañón Rodríguez

Los caminos de la orientación

Este fin de semana se celebra en Alicante el Campeonato de España de Orientación en su modalidad de raids de aventura.

Como muchos sabrán, el atleta de pruebas de orientación realiza un recorrido pedestre, ciclista, subacuático, nocturno o sobre la nieve con la ayuda de un mapa para situarse, un reloj para medir los tiempos, una brújula para determinar las direcciones, un curvímetro para medir las distancias no rectilíneas sobre un mapa y un podómetro para conocer las distancias recorridas al andar…

En su «travesía» o itinerario pasa por «encrucijadas» con caminos que se dividen en varios ramales y se bifurcan «en aguja» o dos ramales divergentes, «en T» con un camino que desemboca en otro en ángulo recto y «en talón» con varios ramales que dan a un camino en la dirección de la marcha que lleva el deportista.

Sortea puentes peatonales estrechos sin o con barandillas («palancas» y «pasarelas»), «atrocha» o anda por atajos y busca los «tornos» o vueltas del camino para superar un gran desnivel.

Aunque el poeta Antonio Machado dijera lo de «caminante, no hay camino, se hace camino al andar», los deportistas de la orientación surcan una gran variedad como: «acornisado» (que flanquea una pendiente muy fuerte o una pared), «carretero» (apto para circular con carro), «de herradura» (para circular a pie o con caballería), «de sirga» (que va por la orilla de un río o de un canal, desde el que se podía tirar con cuerdas, para arrastrar una embarcación por el agua), «real» (que comunica las poblaciones más importantes)…

Y le toca competir en recorridos por la «calzada» como vía romana, carretera o pista; la «calle» o pasillo entre rocas, zona de arbolado o vallas de cerramiento de propiedades; el «carril» o camino peatonal ahondado en el terreno; la «pista forestal» como vía reservada para el servicio de un monte; la «senda» o camino peatonal estrecho que cuando está en zona de montaña se convierte en «sendero»; y los caminos ganaderos de diferentes anchuras como la «vereda», el «cordel», la «cañada» o la «colada».

Siga los nuevos éxitos de los asturianos Eladio García y Alba San Pedro por collados, majadas y vericuetos a la búsqueda de las coordenadas geográficas y geocéntricas que llevan a meta.

Publicado en La Nueva España, Oviedo, 1 de octubre de 2007.