El pescado original
El pescado original
Palabras en juego
Jesús Castañón Rodríguez
Los Juegos de la XXIX Olimpiada de la Era Moderna dicen hoy «zai jian» o adiós con el apagado del pebetero del estadio de El Nido. Para el lenguaje, han seguido la divisa «Citius, altius, fortius», ideada por el dominico Henri Didon en 1891 para ser más dignos, más altos y más fuertes en la mejora personal, al registrarse una renovación de lemas, nuevas expresiones, la variedad de la terminología americana, la vivencia institucional de los aros académicos y numerosos apodos y juegos de palabras.
En esta edición, los sobrenombres «Relámpago» y «El hombre pez», relativos al atleta jamaicano Usain Bolt y al nadador estadounidense Michael Phelps han sustituido a los mitos «Hijo del viento» Carl Lewis y ‘El Albatros’ Mark Spitz. Los juegos de palabras han aparecido en los diarios americanos tras agotarse los adjetivos para valorar una constante repetición de victorias: «El pescado original» para las ocho medallas de oro de Michael Phelps, «Voló sobre El Nido» para Usain Bolt en tres carreras de velocidad y «Un salto a la inmortalidad» para la victoria y vigésimo cuarta plusmarca mundial de la pertiguista rusa Isinbayeba.
Hasta que se vuelva a encender la llama de la antorcha en 2012, es tiempo de una nueva «olimpiada» en la que las palabras fijen en el recuerdo los momentos especiales que no han tenido su relato por resultar imprevistos, tener un altísimo grado de perfección o haberse visto envueltos en la euforia: la ejecución de los chinos Yue Lin y Liang Huo en salto de palanca sincronizado, la enésima victoria de Rafa Nadal, la doble medalla de la británica Romero en remo (2004) y en ciclismo (2008)…
La participación asturiana, con los brillantes resultados de Samuel Sánchez, Juan Fernández, Alberto y Raúl Entrerríos, Rubén Garabaya y Jana Smidakova, aumentará la bibliografía olímpica relatada, entre otros, por Alfonso Martínez Magdalena y los miembros de la Academia Olímpica Española Agustín Antuña y Conrado Durántez. Renovará el legado que, entre 1894 y 2008, dejaron la Universidad de Oviedo en el congreso fundacional del Comité Olímpico Internacional o las exposiciones «Sueños Olímpicos» y «Espíritu Olímpico: Asturias en los Juegos Olímpicos» para buscar nuevos logros.
Publicado en La Nueva España, Oviedo, 24 de agosto de 2008.